Prevención

La Directora de la institución subraya la existencia de peculiaridades de los puestos tradicionalmente femeninos que no han sido suficientemente analizadas.

El Instituto Asturiano de la Mujer invita al abordaje de los riesgos laborales desde una perspectiva de género. En una jornada organizada esta mañana en colaboración con el Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales (IPRL) y la mutua Fraternidad Muprespa, la directora del organismo, Almudena Cueto, subrayó el error de presumir seguros y fáciles los puestos ocupados mayoritariamente por mujeres, ya que tienen componentes posturales, musculares y de fuerza de repetición que no han sido suficientemente analizados. Cueto coincidió con las otras ponentes de la jornada, Ofelia García, jefa del Área de Higiene Industrial del IPRL, y Natalia Fernández, subdirectora de Prevención, Calidad y Documentación de la compañía aseguradora, en que las diferencias biológicas entre mujeres y hombres pueden afectar a los riesgos a los que se enfrentan en el trabajo, así como a la forma de evaluarlos y controlarlos, lo que determina la convicción de que es preciso acometer análisis rigurosos con perspectiva de género, aplicando las medidas de seguridad correspondientes.

Según ha puesto de manifiesto Almudena Cueto, la mayoría de las mujeres trabaja en perfiles muy determinados (copan el noventa por ciento del sector servicios) y además de tener que compaginar su jornada laboral con el trabajo en casa cuentan con poca representación en puestos de supervisión y dirección.

Por todo ello, las tres instituciones promotoras de la jornada formativa de hoy han consolidado la pretensión de constituir en las próximas semanas un grupo de trabajo multidisciplinar en el que participarán expertos de las tres entidades, a los que se sumarán representantes del mundo de la Universidad y de la empresa. El objetivo de las entidades firmantes se resume en la necesidad de avanzar hacia la efectividad de las medidas de prevención, mejorar las condiciones de trabajo, alcanzar la igualdad de oportunidades de todas las personas trabajadoras e impulsar la competitividad de la sociedad y las empresas asturianas.

Fuente: La Nueva España.